Ana Iturgaiz: "Yo me siento mucho más atraída por protagonistas alejados de los tópicos". Su nueva novela, 'Bajo las estrellas'

(Círculo de Lectores)

- ¿Recuerdas alguna novela en especial que te animara a dar el paso de lectora a escritora de romántica?

- No fue una novela en especial, sino más bien la confluencia de dos procesos separados que desembocaron, por un lado, en la necesidad de escribir y, por otro, en el deseo de que la historia fuera romántica. Yo había retomado la lectura de literatura romántica, que había abandonado hacía tiempo. Además, tenía un blog que alimentaba con cierta frecuencia y comencé a plantearme escribir algo más que mis pensamientos. Sin embargo, el detonante que me obligó a tomar la decisión de comenzar a escribir fue un curso de novela romántica que encontré en internet. No me lo pensé dos veces y me apunté.

- ¿Qué necesita un protagonista masculino para resultar interesante?

- (Risas.) Si supiera la clave, la aplicaría sin dudarlo. Pero, por desgracia, no la tengo. Lo que a mí me atrae de los protagonistas masculinos es que sean decididos, que tengan claro el rumbo a tomar, que sepan a dónde quieren llegar. Ya llegará la hora en la que se desvíen del camino que han trazado para sí mismos.

- ¿Y lo que no puede faltar en la heroína de la novela?

- ¿Quién quiere heroínas? Yo no, desde luego. No sé tratar con ellas. Mis protagonistas siempre son personas normales, sacadas del común de la gente, que sienten y padecen del mismo modo que lo hacemos el resto. No sé lo que pensarán los lectores, pero yo me siento mucho más atraída por protagonistas alejados de los tópicos que de los hombres duros y de las indefensas mujeres.

- ¿Cuál es el defecto imperdonable que jamás adjudicarías a un personaje?

- La ruindad en todos sus aspectos. Es algo que me parece imperdonable y sería incapaz de adjudicárselo a ninguno de mis personajes principales.

- ¿Cómo escoges una época histórica para ambientar tus novelas? ¿Cuál sería tu favorita?

- Lo cierto es que, hasta ahora, ha sido la época la me ha encontrado a mí y no al contrario. En el caso de "Bajo las estrellas", lo que tenía claro era el lugar. Quería situar la novela en la zona de Navarra en la que está ambientada, así que busqué en los manuales de historia un periodo histórico que me ofreciera lo que yo deseaba. En el caso de la novela en la que estoy trabajando en este momento, lo que tenía era la profesión del protagonista masculino y eso me dirigió a la época y al lugar. Pero si tengo que elegir una época en la que realmente me encantaría situar una de mis novelas sería en algún enclave de la Hispania romana. Es una idea. Lo tengo en mente para un libro futuro.

- ¿Cuando estás trabajando en un libro, lo primero que escribes es...
a/La primera frase.
b/El primer encuentro: chico conoce a chica.
C/Una escena de alto voltaje erótico.

- Sin duda, la primera frase. Soy de las que escribo las historias en la secuencia real en la que transcurren. Una escena tras otra, empezando por la primera y terminando por la última. Me resultaría imposible meterme en la historia y en las reacciones de los personajes si lo hiciera de otra manera.

- ¿Y lo que más difícil te resulta escribir?

- ¿Las escenas de sexo? Creo que sí, desde luego son las más complicadas. No solo porque a veces resulta difícil encontrar las palabras adecuadas sino porque, si en la novela aparecen varias escenas de este tipo, hay que variar para no repetirse en ninguna de ellas.

- ¿Prefieres el amor a simple vista (hablamos de ficción) o que tus protagonistas se detesten en su primer encuentro?

- Yo soy más de ir poco a poco en las relaciones. Los amores repentinos me resultan poco creíbles, así que no los escribo. Mis personajes son de los que evolucionan con la historia, de los que pasan por varias fases hasta que se al final se dan por vencidos.

- ¿Quién tiene más peligro: un galán paranormal (tipo Cazador Oscuro) o el canalla terrenal de toda la vida?

- El canalla, el canalla que pasa por la calle con cara de buena persona, pero con el corazón encogido. (Aunque reconozco que un Cazador Oscuro puede tener mucho peligro también.)

- ¿Qué lees cuando no lees novela romántica?

- De todo un poco: novedades editoriales, recomendaciones de amigos, relatos, libros de historia para buscar documentación, etc. Dependiendo de lo que me apetezca esa temporada, cojo un tipo de libro u otro. Aunque confieso que leo mucho menos desde que escribo. Y es que las horas del día no dan para todo.

- ¿Y qué te gusta hacer cuando no estás escribiendo?

- ¿Lo que más? Leer, forma parte de mi vida diaria, no podría pasar sin hacerlo, y, después, estar con la familia y con los amigos. También me encanta viajar, pero eso es algo que no puedo hacer muy a menudo.

- El primer lance amatorio debería tener lugar...
a/Antes de la página 100.
b/Antes de la página 50.
c/No hay reglas: mejor donde y cuando menos te lo esperas.

- Me quedo con la tercera opción: según y cómo. Es la historia, los personajes, la época o las situaciones las que marcan el momento. Me ha pasado alguna vez tener señalada la primera escena de sexo en un lugar más o menos avanzado de la novela y adelantarla porque quedaba poco natural alargar la situación hasta ese momento.

- ¿Tus lectores masculinos existen (aunque sean silenciosos). ¿Les dirías algo en especial (aunque no se den por aludidos)?

- Que espero que la historia de "Bajo las estrellas" les atraiga y le den una oportunidad; que deseo que la lean y, sobre todo, que la disfruten. El amor no es potestad solo del género femenino. Les animaría a que se atrevieran a darse a conocer. En un foro literario que sigo, el moderador del grupo de literatura romántica es un hombre.

- ¿Te has vengado alguna vez de alguien a través de un personaje? (No es necesario que des pistas concretas...)

- No se me ha ocurrido nunca, pero ahora que lo mencionas... me parece una buena idea. Seguro que para la siguiente novela encuentro varios candidatos. (Risas.)

- ¿Qué te aporta la novela romántica que no encuentras en otro género?

- La sensación de que las cosas no tienen porqué ser tan crudas, tan crueles, tan devastadoras como alguno por ahí fuera nos quiere hacer creer; la ilusión de que aún es el tiempo del cariño, del amor; la idea de que todo alcanza su meta y de que ese final puede ser el mejor de los posibles.

- ¿La escena más romántica de la historia del cine o la literatura es...

- Una de cada. De la literatura: en la primera declaración del protagonista masculino de "Orgullo y prejuicio", cuando ella lo rechaza, él se despide con un “acepte mis mejores deseos de amor y de felicidad”. Recuerdo que pensé “¿cómo es capaz de desearle que sea feliz cuando ella lo acaba de rechazar por activa y por pasiva?” y, después, “eso sí que es amor”. Del cine: la escena final de la película "Ágora" de Alejandro Amenabar, cuando él la mata con sus propias manos para salvarla de una muerte más cruel. Me quedé de piedra al ver cómo una escena tan violenta podía encerrar tanto amor.

- ¿Y la declaración de amor más torpe (o simplemente mejorable) que has visto en una película o una novela?

- Debe de ser que no me fijo en ellas porque no se me ocurre ninguna. Pienso que si está bien narrada, una simple mirada sirve para que sea una declaración de 10. Los lectores de Círculo que os animéis a leer Bajo las estrellas descubriréis una historia de caballeros imperfectos, de mujeres valerosas, de templarios, de mazmorras, de malvados, de lealtad, de venganza, de amistad y, por supuesto, de amor. En definitiva, encontraréis amor y aventura a raudales. Espero que las palabras que estas páginas contienen os permitan evadiros durante el tiempo que os dure su lectura y os conduzcan hasta esos parajes y épocas tan excepcionales de nuestra historia. Un fuerte abrazo